Tamaulipas: Don Fernando ha operado por 67 años el elevador del Palacio de Gobierno

Fernando Frausto Martínez es el operador del elevador que funciona en el Palacio de Gobierno de Tamaulipas, labor que ha desempeñado por 67 años, tiempo en el que ha trabajado con 12 gobernadores y conocido a tres presidentes de la república. A él se le debe que los pisos en este edificio tengan nombre, por ejemplo cuando se va al tercero él dice que los lleva a El Cielo. Tras casi siete décadas laborando como elevadorista, Don Fernando le dice adiós a su labor y ha decidido jubilarse por motivos de salud. Desde hace 67 años, todos los días Don Fer, como le dice el personal, acudía al Palacio de Gobierno a desempeñar su labor con felicidad y amabilidad y siempre recibía a las personas con una sonrisa. Don Fer bautizó cada piso del Palacio de Gobierno y repetía los nombres cada vez que oprimía uno de sus botones: Planta Baja, Ciudad Victoria; Piso 1, Paraíso; Piso 2, el veintidós; y Piso 3, El Cielo. En sus años como elevadorista, conoció personalmente a 12 gobernadores tamaulipecos, desde Horacio Terán Zozaya hasta el mismo García Cabeza de Vaca y gracias a su trabajo también ha podido conocer a los presidentes de la República José López Portillo y Andrés Manuel López Obrador, en el mismo elevador que ocupó por tantos años, y a Miguel de la Madrid Hurtado, también en Palacio de Gobierno.

Recibe reconocimiento

Por su trayectoria y dedicación al servicio al gobierno de Tamaulipas como operador de elevador, el gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, entregó un reconocimiento a Fernando Frausto Martínez en una ceremonia en el patio central de Palacio de Gobierno en Ciudad Victoria. Por esta trayectoria de tantos años de servicio, el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca instruyó que la jubilación se otorgue con nivel de subsecretario. “A todos los que tuvieron el honor de llegar a la gubernatura y a sus colaboradores de todos esos años, les doy las gracias porque siempre me atendieron bien, con una actitud de respeto, simpatía y a todos ustedes, mis compañeros de toda la vida de trabajo, les agradezco su amistad y nunca me lo voy a olvidar de todo esto”, mencionó Don Fernando. Por su parte, el gobernador agradeció su vocación de servicio y en su honor colocó placas en cada piso del recinto gubernamental con los nombres que Don Fernando les dio. “Gracias por su servicio, Don Fernando y gracias por hacernos los días más felices con su sonrisa y con su amabilidad; profesa una profunda fe católica, todos los días que me bajo del elevador me dice que Dios lo acompañe, y ahora le digo yo a usted Don Fernando, que Dios lo acompañe y lo cuide muchos años más… ¡Lo vamos a extrañar en Palacio de Gobierno!”, destacó el gobernador de Tamaulipas.