noviembre 24, 2024

No sueltan la chequera en Morena Sonora

En la reciente Asamblea del Consejo Estatal de Morena en Sonora, máxima instancia de toma de decisiones partidista, según lo que dicen los estatutos que organizan la vida interna de Morena, se tomó la decisión por apabullante mayoría de los votos de los Consejeros Estatales, de remover de su cargo a Alma Limón Moreno, la Secretaria de Finanzas del Comité Ejecutivo Estatal, luego de una larga lista de presuntas irregularidades en el ejercicio presupuestal de ese partido político y que ninguno de sus miembros lo considera de beneficio al interior, más que solo para el grupo político o tribu a la que pertenece la funcionaria destituida.

Hay muchas leyendas urbanas e historias no muy gratas sobre la manera como se manejan los dineros en el partido que encabeza la 4T en Sonora que no son 10 mil pesos, por cierto, sin contar las aportaciones del Comité Ejecutivo Nacional, Morena Sonora ejerce para este año 34 millones de pesos.

Los ejes rectores para llevar a cabo la trasformación de la república que impulsa Morena, son el no robar, el no mentir, el no traicionar, que puestos en la práctica han quedado lejos de aplicarse, militantes de Morena que verdaderamente creen en el proyecto, se han llevado una desagradable sorpresa, al topar con pared y observar la manera discrecional con la que una persona ha ejercido el presupuesto para beneficio político de su tribu.

Alma Limón Moreno acaba de entregar una carta dirigida a los Consejeros Estatales y militantes, en la que dice que la Asamblea Estatal de Morena no tiene las atribuciones de destituirla de su puesto, se requiere la aprobación de la Comisión Nacional de Honor y Justicia, por lo que de ninguna manera entregará la chequera ni la firma.

Lo que sucede en Morena en Sonora, es una caja de resonancia de la lucha intestina entre las tribus de ese partido que protagonizan a nivel nacional que lo tienen cabeza arriba y cruzando por una fuerte crisis política. La disputa por el poder y control de los recursos en sin cuartel.

Solamente a la ex dirigente Yeidckol Polevnsky, se le acusa de malversar 450 millones de pesos al realizar compras millonarias de inmuebles y llevarse una buena tajada en las operaciones.

Y eso que los partidos políticos tienen estricta fiscalización de los recursos que reciben, como dirían los clásicos, para todo hay maña.