El gobierno de Sinaloa quiere evitar violencia extrema en el Estado, como sucedió en Jalisco, Guanajuato, Ciudad Juárez y Tijuana durante la semana pasada.
“(Esa violencia) Yo quisiera que no se arrime para acá, pero ese es un deseo mío, estamos tomando las medidas para que eso no ocurra y para muchos es extraño por qué Sinaloa no, por qué no está. Yo espero que siga no estando en esos casos de la violencia extrema que se dio la semana pasada”, señaló Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa.
Hubo bloqueos, incendio de vehículos y comercios, asesinatos, personas detenidas por militares y cierres de áreas de trabajo y escuelas por el miedo a ser atacadas por grupos criminales en Jalisco, Guanajuato, Ciudad Juárez y Tijuana.
Fueron jornadas similares a lo que sucedió el 17 de octubre de 2019 en Culiacán, con el llamado “Jueves Negro“, el día que grupos criminales paralizaron la ciudad para evitar la detención de Ovidio Guzmán López, hijo del criminal Joaquín Guzmán Loera.
Rocha Moya aseguró que se busca evitar la violencia como aquella ocasión o como recientemente ha sucedido en otros estados del País.
“Nosotros hoy ya lo vimos en la mesa de seguridad para efecto de tomar nuestras medidas, tiene que ver con desarrollo de la inteligencia a partir del efecto de ver quién entra, quién sale, sobre todo eso. Un poco blindar el estado”, expresó.
El gobierno federal estableció que se realizará un informe para analizar los eventos en Jalisco, Guanajuato, Chihuahua y Baja California, pues a la fecha no se tiene un diagnóstico oficial para explicar las jornadas de violencia extrema.
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